El continente africano ha sido, a lo largo de la historia, un actor clave en la migración humana. Las culturas y costumbres han sido compartidas, adaptadas y reimaginadas como resultado de este movimiento de población, y los estilos arquitectónicos no son una excepción. En cierto modo, la variada arquitectura presente en África es un lente que se puede usar para comprender las complejidades de la migración. En el continente están presentes antiguas tipologías indígenas y constructivas nacidas de la asimilación orgánica de culturas. También están presentes los restos de la arquitectura colonial, un legado no de la migración voluntaria, sino de la imposición colonial forzada.
Sin embargo, hay una parte del continente que alberga una tradición arquitectónica de riqueza única: la costa Swahili. Una estrecha franja de tierra que se extiende a lo largo del borde oriental de África desde Mozambique en el sur hasta Somalia en el norte. El área alberga lo que se denomina Arquitectura Swahili, una representación arquitectónica de una combinación cultural de influencias que van desde África continental hasta la Península Arábiga y el Sur de Asia.
La base de esta cultura swahili se puede encontrar en lo que fue una confederación flexible de antiguas ciudades-estado en la costa swahili: Lamu, Zanzíbar y Kilwa, todas las cuales han sido designadas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. El siglo XIII vio a los estados existir como centros de comercio con el imperio rico en oro del Gran Zimbabwe ubicado en el interior más profundo del continente. El comercio de marfil y productos alimenticios hizo crecer la riqueza de las ciudades-estado, pero esta riqueza también fue sostenida por la oscura corriente subterránea del comercio de esclavos del Océano Índico.
Un elemento definitorio de la arquitectura swahili es el uso generalizado de piedra caliza, que es lo que le da a los paisajes urbanos de Lamu Old Town en Kenia y Stone Town, la Ciudad de Piedra en Zanzibar, su apariencia distintiva. La piedra coralina se empotra en muros de mampostería con un mortero de cal, arena y tierra roja, que protege el interior del calor costero. Los postes de manglares, que se encuentran localmente, se utilizaron para construir los techos, una ejemplificación de la característica definitoria de la Arquitectura Swahili: la de un estilo que es una amalgama distintiva de influencias culturales.
En contraste con las paredes exteriores lisas y de color blanco de los edificios en la costa Swahili, la ornamentación detallada de las puertas es también un elemento central que expresa la cultura. Los diseños de las puertas de madera tallada de forma ornamentada se remontan a un largo linaje de artesanos de la costa swahili, que a su vez vio influencias del Medio Oriente y el subcontinente indio. Las puertas con marcos rectangulares y dinteles rectos son emblemáticos de un estilo swahili más antiguo, con dinteles arqueados que solo se hicieron más frecuentes a fines del siglo XIX, con una mayor influencia del Medio Oriente. El dintel de la puerta llevaría inscripciones árabes talladas, la mayoría de las veces una cita del Corán o información sobre el propietario respectivo de la casa.
A nivel urbano, las ciudades swahili están organizadas en barrios divididos por murallas, y la religión juega un papel importante en la planificación urbana. Una mezquita era el centro de cada barrio, y cada pueblo también albergaba mezquitas congregacionales para los viernes. Un plan islámico estándar fue la base de este diseño, con una gran mezquita central y calles principales que se extienden al norte, sur, este y oeste de sus alrededores. Estas calles son característicamente estrechas, una característica urbana definitoria de Stone Town y Lamu Old Town.
Internamente, la casa típica swahili se diseñó alrededor de un patio central autónomo. El espacio habitable está separado del espacio público y un porche interior está orientado hacia una pared en blanco que bloquea la vista del patio interior. Las ventanas con contraventanas de madera estarían presentes, entreabiertas para la luz del día, junto con balcones que se extienden ornamentados y bancos de concreto adosados a la fachada principal del edificio. El patio interno, no visible para el público, serviría para enfriar la estructura interna, al mismo tiempo que serviría como un elemento clave para mantener la privacidad.
A lo largo de la historia, la Arquitectura Swahili ha evolucionado junto con los migrantes que han establecido su hogar en la Costa Swahili. El estatus relativamente reciente de protección de la UNESCO de Kilwa, Lamu y Stone Town ha visto el advenimiento de guías de diseño locales, como una para Stone Town, que describe métodos armoniosos para trabajar con la arquitectura histórica de piedra. También se encuentra la aparición de firmas como Urko Sanchez Architects con proyectos en el casco antiguo de Lamu, un edificio de estilo moderno que rinde homenaje a los principios de la arquitectura swahili.
La influencia de la arquitectura swahili está muy extendida, y al observar su arquitectura se revela la capacidad perdurable de los métodos de construcción transmitidos de generación en generación, y cómo la migración humana actúa como un catalizador no solo para el intercambio cultural, sino también para cambiar la forma en que las personas construyen.
Este artículo es parte del Tema del mes en ArchDaily: Migraciones. Cada mes exploramos un tema en profundidad a través de artículos, entrevistas, noticias y obras. Conoce más sobre nuestros temas. Y como siempre, en ArchDaily valoramos las contribuciones de nuestros lectores. Si quieres postular un artículo o una obra, contáctanos.